Sabemos que la forma de ser de un niño —entendiendo por niño un niño varón— se construye: la masculinidad no es innata, y los estereotipos se forman a través de la educación, los juegos, la cultura y los referentes. Les enseñamos a ser insensibles, agresivos, impasibles y competitivos, en lugar de enseñarles a ser empáticos, solidarios, compasivos, respetuosos y a convivir con los niveles adecuados de autoestima. A menudo no somos conscientes de cómo los niños aprenden a ser niños, y esto se debe a que el sistema patriarcal ha estructurado nuestra sociedad de manera que en la mayoría de los casos no nos percatamos de ello.
En los últimos siglos, a través del movimiento feminista las mujeres han replanteado su lugar en el mundo y han comenzado una lucha por conseguir una sociedad más justa. ¿Qué ha pasado con los hombres mientras tanto? Lamentablemente, no ha habido ninguna reacción por parte de ellos frente a la violencia machista y las injusticias de las que son víctimas las mujeres. Los hombres no se han movilizado para renunciar a sus privilegios.
Educar a un niño en el feminismo es una invitación a ver con nuevos ojos nuestra manera de educar a los niños, con el fin de detectar y cambiar muchos de los errores y las injusticias que repetimos inconscientemente. Porque es necesario educar a los niños como seres pensantes y autónomos, liberados de la construcción del género y de los roles que la sociedad se empeña en transmitir.
A pesar de considerarme una mujer liberal y feminista, este libro me ha abierto nuevas áreas de reflexión sobre mi propio reconocimiento como mujer y sobre cómo educar a mi bebé hombre próximo a nacer. En respuesta a la invitación para dejar mis comentarios para futuras ediciones del libro comparto lo siguiente: - pienso que sumaría mucho a los hombres que se interesan por este tema y lecturas (mi pareja hombre es quien lo eligió para nosotros) serviría que se profundice un poco más en cómo el patriarcado les afecta y como el feminismo también abre la puerta a que este sistema sea cuestionado por ellos, es algo con lo que cierra el libro, pero un análisis más profundo sobre esos puntos creo que puede sumar mucho, no porque se les de protagonismo como las victimas sino para que se extienda la conciencia y entendimiento de la toxicidad del sistema patriarcal. Si bien cada uno tiene su lucha, seguimos siendo parte ambos de los mismos contextos, problemáticas, dolores y también soluciones.
Publicado lunes, 26 de diciembre de 2022 a las 2:57 (9521)Me ha impactado mucho toda la realidad que se describe en este libro.
Publicado martes, 17 de noviembre de 2020 a las 18:53 (8754)El machismo tiene que ver con la relación que se tuvo con el padre, es decir, si este educó al niño, o mal educó, si no estuvo presente, si sólo estuvo para infundir miedo, etcétera.
Publicado domingo, 8 de marzo de 2020 a las 15:12 (8480)